Pasadas las veintiuna horas de ayer, vía telefónica, su voz era ronca pero decidida: “Se trata de un ‘placebo legislativo’ pero se logró librar de la cárcel a las mujeres que optan por la decisión de interrumpir su embarazo. Dimos un paso adelante a favor del derecho.” La diputada perredista habló sobre la última decisión a que se llegó en el Congreso veracruzano, cuando de forma rápida, el partido Revolucionario Institucional, a través de la diputada Ángela María Perera, presentó una modificación al artículo 150 del Código Penal y que trata sobre la penalización del aborto en la entidad.
La perredista explicó que la modificación final señala que la mujer que opte por la interrupción del embarazo recibirá sanción a través de la obligatoriedad de un tratamiento médico, pero con libertad. En el segundo párrafo del artículo 150 del Código Penal, quedará expuesto que la o las personas que ayuden a la práctica del “aborto” merecerán la sanción penal que va de 6 meses a 4 años de prisión y la imposición de una multa.
“A veces tenemos que avanzar poco a poco” dijo Margarita Guillaumín, pero también explicó que esta reforma no soluciona el problema de fondo. “Hay una voluntad de consenso que permitió modificar la sanción y nuestra meta es que se respete el pleno derecho de las mujeres a decidir su maternidad de una manera libre e informada. No hay poder del Estado que pueda invadir ese derecho fundamental, la que quiera tener hijos que los tenga, pero si les darán una vida digna, pues adelante.”
La diputada perredista explicó que a pesar de las controversias se logró la capacidad para vencer la resistencia y que por esta ocasión se logró un beneficio que no se debe tildar como mínimo, porque se trata, en inicio, del derecho a la libertad.
Finalmente, la diputada Guillaumín comentó sobre que si el jaleo en tribuna y los comentarios de otros diputados que zanjaban el asunto con que se trataba de una jugada más del gobernador Fidel Herrera, dijo que su lectura era muy distinta. Y que ella será la primera en defender el derecho a la vida desde el momento de la concepción el día en que el Estado le garantice a todas las mujeres embarazadas que tendrán atención integral desde la concepción hasta el parto: “Cuando no haya pobreza y desnutrición, será otro el debate.”