lunes, septiembre 11, 2006

Las posibilidades de una “margarita”

Felipe Calderón Hinojosa, presidente electo de México, dijo que va a gobernar con “Margarita de la mano”. La frase no tiene ambigüedades, porque su esposa se llama Margarita Zavala; pero de momento pareciera que el señor es aficionado a ese trago que se prepara con tequila, jugo de limones, licor de naranjas y hielo picado. Ah, y para que valga como coctel patriótico, por el mes de septiembre, pues tiene que ser Herradura... aunque lo haya comprado una compañía estadounidense, con todo y se denominación de origen. Y si esto fuera, pues Calderón no sería el único —y suponemos que ni el último— presidente aficionado a la copa; Victoriano Huerta, el “traidor”, despachaba los asuntos de palacio nacional desde la cómoda silla de una cantina.

Pero también la frase tiene otras posibilidades, no pensemos sólo en el vicio. Por ejemplo, se dice que uno anda “deshojando la margarita” cuando se está cabizbajo debido a un amor que no corresponde como nosotros quisiéramos. Como dicho, como sonsonete, pues es una expresión pintoresca; en primer lugar porque la margarita —conste, aquí nos referimos a la flor— no tiene hojas sino pétalos. Y claro, a la “margarita” se le pregunta, quitándole pétalo por pétalo: ¿me quiere? ¿No me quiere? (¿se acuerdan de esa famosa canción del grupo Mocedades?)

Pero si de Margarita Zavala Gómez del Campo se trata, pues además de ser la esposa del presidente electo, en marzo de este año pidió licencia en el Congreso, dejó su curul para sumarse a la campaña presidencial que emprendió su esposo. Pero una parte de su discurso, como candidata y ya diputada, fue evitar a toda costa la posibilidad de despenalizar el aborto y será muy abogada por la famosa Escuela Libre de Derecho, pero allí las manecillas apuntan su pertenencia a una de las alas más radicales de Acción Nacional. ¿Funcionaría observar la gestión que realizó como diputada federal? No hay que olvidar que todo poder es posibilidad y las posibilidades marean, a veces, muy pronto.

La trayectoria política de la señora está ligada, eso sí, a un solo partido. Ingresa a Acción Nacional en 1984, cuando tenía diecisiete años. Llega al cargo de Secretaria Nacional de Promoción Política de la Mujer (de 1999 a 2003) y se le ubica como una de las personas cercanas a Carlos Castillo Peraza. Ahora, si esto nos huele a un trayecto sin mácula, si esto no es suficiente para comenzar a poner los diques, las aguas, las grandes aguas pueden desbordarse antes de tiempo y no olvidemos que tanto el señor como la señora son tan, pero tan educados, que cuando comen agarran el tenedor con la mano derecha.

Dicen por ahí que por cada mil ateos honrados hay un beato sinvergüenza. Así que los focos rojos están encendidos, porque una cosa es creer en Dios y otra montarlo como bandera; una cosa es ser la “primera dama” y otra “la señora presidenta”. Margarita, no la flor ni la copa, fue a escuela de monjas hasta la preparatoria y su primera hija, María, se llama así por honor a la virgen... Hasta mañana.

GRATIS
Chiste para comenzar la semana (cortesía de Manolo Zepeda, director de Divulgación artística de la UV): Llega un borrachito a una cantina, famosa por las botanas que allí sirven, y le pregunta al cantinero. “Jefe, jefe, ¿tiene trompa e cuchi?” El otro le responde, solícito: “Claro, señor”. “Ah” contesta el borrachito, “¿y tiene rabo e buey?”. Sin perder la calma, el de la barra responde “Por supuesto”. “Mejor me voy a otro lado, aquí hay puro mostro”.