El cine francés regresa a las andadas como plato fuerte de la XLVIII Muestra Internacional de Cine, que se exhibe en esta ciudad capital a partir de este viernes y hasta el miércoles 14 de febrero. De trece filmes que se proyectarán en el centro cultural El Ágora de la Ciudad (una cinta diaria con tres funciones: 16, 19 y 21 horas) cinco son de factura francesa, tres corresponden a América y el resto son películas “europeas”.
Es decir, la selección que llega a esta ciudad capital son trece cintas recientes, que van de los años 2004 a 2006. Pero este carácter “europeo” no lo hace mejor ni peor; más “culto” o con sexo explícito pero que para como “erótico”; es más bien la oportunidad de ver historias que difícilmente serán promocionadas por las grandes cadenas que controlan la exhibición en México. De hecho, el carácter de estas “muestras” es presentar al público una selección de lo que la crítica considera las mejores producciones de un país, que está muy lejos de parecerse a la mercadotecnia de los premios de la Academia estadounidenses. Lo que el público asistente a esta muestra verá son las historias que toman el pulso del mundo, pero desde la particular mirada de los directores.
Que la selección de esta 48 Muestra está dominada por historias estremecedoras, crudas y de escasa fantasía —a ninguna le falta creatividad, que es algo distinto— no quiere decir que sea una visión del fin del mundo, sino más bien el reflejo de los sueños que atribulan a cualquier ciudadano. Aunque sí, quizá una de las cintas más esperadas se trata de “París, te amo”, un filme construido por 18 episodios pero dirigido por una veintena de reconocidos directores de los que mencionaré aquí sólo a Alfonso Cuarón, Gerard Depardieu y Walter Selles. Esta cinta ofrece al espectador un recorrido mural por la capital francesa y la oportunidad de visitar los barrios de la “Ciudad Luz”; pero ¿se trata del París de lujo o de la verdadera ciudad? Una incógnita que se resolverá el martes 6 de febrero.
Aunque el cine de factura mexicana es el gran ausente, las cintas americanas valen la pena. Este viernes 2, en lugar de lamentarse por no haber asistido a la tradición y los desmanes tlacotalpeños, puede hacer un viaje al corazón de Xalapa y disfrutar una intrigante y macabra versión de “Alicia en el país de las maravillas” pero titulada “Tideland” (Terry William, Canadá, 2005), donde una pequeña protagoniza un tétrico cuento de hadas y en lugar de sombrereros locos hay muñecas Babie decapitadas. “Las mantenidas sin sueño” (Vera Fogwill y Martín de Salvo, Argentina, 2005) se exhibe el domingo 4 y los sinsabores de la vida se presentarán cuando veamos que una niña de diez años tiene que atender a su madre, una cocainómana. La última cinta americana se proyecta 14 de febrero: “Wassup Rocker” (Los nuevos guerreros, Larry Clark, Estados Unidos, 2005) y a decir de su director se trata de: “Dos de mis filmes favoritos de toda la historia son The Swimmer, dirigida por Frank Perry, y Los Guerreros, dirigida por Walter Hill. ¿Recuerdan a Burt Lancaster inmiscuyéndose a las casas de Beverly Hills desde los patios traseros, y nadando de piscina en piscina? ¿O a Los Guerreros tratando de llegar a su casa, yendo de vecindario vándalo en vecindario vándalo? Mis ‘rockeros’ van a Beverly Hills de traspatio en traspatio, tratando de escapar y, como Los Guerreros, intentando llegar a salvo a casa”.
Buen cine en Xalapa. Y a partir de hoy, consulte las sinopsis y críticas de cada una de las películas de la XLVIII Muestra Internacional de Cine en la sección de cultura de este periódico.