Las multas por infracciones al Reglamento de Tránsito en la ciudad de Xalapa y que los morosos deben cubrir, parten de los cinco salarios mínimos en adelante. Pero los automóviles oficiales o las unidades de mayor tonelaje que cometen una infracción no tienen por salvoconducto que sus conductores, presentes o no al momento de la aplicación del acto correctivo, muestren credenciales de pertenencia al sector público u ostenten logotipos oficiales. “Por instrucciones y por civilidad, ahora sí, como dicen: ‘quien la hace, la paga,’ y ya lo ve” declaró el agente de Tránsito Armando Lara, operador de grúa.
Alrededor del mediodía de ayer, sobre la céntrica calle Rojano, dos autos oficiales que pertenecen al ayuntamiento capitalino se encontraban estacionados en “lugar prohibido.” El agente Armando Lara retiraba las placas delanteras de los vehículos y escribía las boletas de informe de multa cuando fue entrevistado.
“Oficial, pero los autos son del ayuntamiento, ¿también a ellos los infraccionan?” y con un gesto de aprobación, el agente de Tránsito Armando Lara explicó que han recibido instrucciones de no pasar por alto las faltas que se cometen, sea un automovilista particular o uno que conduzca una unidad oficial. Ante un “la ley ya debe ser pareja” el agente explicó que por Reglamento, se toma en consideración si en la calle donde se estacionan las unidades hay o no letreros que señalan que se trata de un lugar prohibido: “Y mire, allí adelante está el letrero, pero a los conductores se les olvidó o no lo vieron, lo que viene y como usted lo ve, es la respectiva multa.”
Pese a que las dos unidades multadas pertenecen al parque vehicular del ayuntamiento de la ciudad de Xalapa, el agente Armando Lara detalló que los infraccionados son los conductores y con un esbozo de sonrisa dijo que no había forma de “multar” a los vehículos, sino a sus conductores. “Yo sé que a veces la población nos ve como los malos de la película, pero se trata de mejorar la vialidad en una ciudad que ya está sobrada de autos.”
Finalmente, el agente Lara explicó que por lógica, la multa la deben pagar los conductores, pero que ignoraba si por tratarse de vehículos oficiales, la multa sea cubierta por el erario público o por los infractores.
