Sin que ella sepa a fondo el funcionamiento del recién creado Instituto Consorcio Clavijero en el estado de Veracruz, cuando en una entrevista exclusiva se le preguntó que si ella apostaba por las nuevas tecnologías en el uso de los sistemas educativos, dijo que sí, que a 50 años de fundada la Academia Mexicana de la Educación, el objetivo es de seguir haciéndose herramientas para mejorar la enseñanza.
Añadió que libros o computadoras o clases por Internet jamás: “Bajo ninguna circunstancia sustituirán la presencia del docente en la formación de los estudiantes.” Se trata de la doctora Margarita Zendejas Merino, presidenta nacional de la Academia, quien río al escuchar que además de que la entidad es uno de los bastiones más fuertes en la educación, también lo es al considerar que se trata del tercer Estado de México que tiene un mayor número de diputados priístas en la cámara baja, en el palacio legislativo de San Lázaro.
Zendejas explicó que la Academia Mexicana de la Educación, cuya fundación data desde hace casi 51 años y de la que ella es fundadora, no se trató jamás de un club de intelectuales que decidió la integración de un grupo. “Surgió por el Instituto Federal de Capacitación del Magisterio, esta institución la creó don Jaime Torres Bodet para que los maestros rurales pudieran cursar su carrera vía correo de papel y completar su formación con los cursos de verano, así fue como se acreditó a los maestros qye eran denominados como rurales,” explicó la doctora.
Según la académica y funcionaria, las autoridades educativas siempre han buscado los mecanismos para reforzar la formación de los profesores y hacerla continua, hace 50 años era a través del correo postal; hoy es la través de la Internet, pero nunca, destacó, se ha tratado de sustituir al profesor por una máquina o una pantalla de televisión, porque: “Una máquina tiene la capacidad de confeccionar productos idénticos, no seres humanos y esos, tienen la capacidad y la libertad del pensamiento.”
La presencia de la doctora Margarita Zendejas en Xalapa, fue por el ingreso de catorce miembros a la Academia Mexicana de la Educación, sección Veracruz.
