sábado, octubre 23, 2010

Tlacotalpan: aún no confirman estado de archivo histórico

Foto: Carlos Cano


A poco más de treinta días de las afectaciones que produjo el huracán “Karl” en la entidad veracruzana, aún se carece de informes sobre cuál es el estado físico del archivo histórico de la ciudad de Tlacotalpan y algunas otras ciudades. “Sabemos que no estaba en un área de sótano, pero no tengo noticias en concreto y lo que urgía atender eran las vidas de los habitantes, ahora tomaremos con mayor detalle el rescate y el recuento de los archivos” declaró la historiadora Olivia Domínguez, directora del Archivo General del Estado.

“No sabemos cómo está la situación del archivo de Tlacotalpan, y aunque ya estoy en contacto con el Secretario del ayuntamiento, lo primero que se hace es aguardar a que todo regrese a su nivel. Lo más importante son las pérdidas humanas”. Con la voz entrecortada, Olivia Domínguez narra que durante las contingencias, también dos cronistas veracruzanos perdieron la vida, el de San Andrés y la de Cosoleacaque.

Una de las actividades del Archivo General del Estado es la copia de fondos y su conservación, en la capital veracruzana. “En las inundaciones recientes, recordamos fondos de fotografía que hay en muchas de estas ciudades y de La Antigua, si llegaron a perderse originales de fotografías, nosotros contamos con una copia. Ya pasó en Agua Dulce, hace diez años rescatamos varios fondos, los perdieron y ahora vienen a consultar a Xalapa.” Sobre los fondos o repositorios fotográficos, la historiadora ha calculado que en la actualidad son aproximadamente ochenta con los que cuenta el Archivo General del Estado.

Aunque para seguir con el tema de los documentos y como la propia maestra Domínguez lo señaló, hay que establecer las diferencias entre los archivos históricos y aquellos de la administración inmediata; aunque a la postre, todo se convertirá en historia. Según la ley del municipio libre, todo archivo está bajo el resguardo del Secretario de cada uno de los ayuntamientos que conforman al estado y en Tlacotalpan, por ejemplo: “Parece que no había riesgo”. En tal caso, habrá que esperar a la evaluación de los daños.

Es importante la ubicación de los archivos, explicó la historiadora, y fue que en las zonas consideradas como de alto riesgo, los ayuntamientos recibieron el consejo de que debían trasladar sus repositorios a segundos pisos. Olivia Domínguez hizo un breve recuento de poblaciones y daños al patrimonio: “Aunque la sugerencia es ubicar los archivos en las plantas bajas o en los sótanos, porque el peso es un factor considerable, en lugares en riesgo permanente, los repositorios se suben”.

En las inundaciones que sufrió la entidad, en el año de 1999, se aprendió la experiencia: segundos pisos. Y la importancia de los archivos es esencial, pues en ellos se conserva la preservación de la memoria de una población y con ello, es más sencillo tratar de explicar por qué funcionó o por qué se fracturó un proyecto. ¿Y qué pasará con una “parte” del archivo de la capital veracruzana, que duerme el sueño de los justos en las oficinas del panteón Palo Verde? Ese no está en segundos pisos.